LVII EDICIÓN DEL TROFEO CERVANTES

La 57ª edición del Trofeo Cervantes, disputada la lluviosa tarde del 31 de agosto en el estadio El Val, dejó una estampa agridulce para la RSD Alcalá. Bajo un cielo gris y con el césped resbaladizo, el conjunto dirigido por Vivar Dorado se enfrentó a la Arandina CF en un duelo que no careció de emociones, pero que, lamentablemente, no concluyó con el resultado esperado.

El encuentro comenzó con intensidad. En el minuto 7, Álvaro Portero, uno de los referentes ofensivos del Alcalá, fue derribado dentro del área, lo que llevó al colegiado a señalar un penalti. La responsabilidad de abrir el marcador recayó en Borja Sánchez, quien tomó aire y disparó con decisión, pero el guardameta visitante, en una intervención magistral, detuvo el lanzamiento, dejando a la afición local con un nudo en la garganta.

La Arandina, aprovechando el impulso anímico tras la parada, golpeó primero. En el minuto 13, lograron perforar la red del Alcalá, adelantándose en el marcador. Pero la reacción del equipo local no se hizo esperar. Apenas cuatro minutos más tarde, el "killer" Álvaro Portero, igualó el encuentro con un gol que hizo vibrar las gradas de El Val.

Ambos equipos buscaban desequilibrar la balanza. Una de las mejores oportunidades para los rojillos llegó con un pase magistral de Arribas que encontró nuevamente a Álvaro Portero, pero el remate se fue desviado, dejando escapar la oportunidad de ponerse por delante.

La Arandina, volvió a tomar la delantera en el minuto 40. El Alcalá, golpeado pero no rendido, intentó reaccionar, pero justo antes del descanso, los visitantes asestaron otro golpe, marcando el tercer gol que les hizo irse al vestuario con un 1-3.

Tras el descanso, los jugadores del Alcalá, conscientes de la dificultad de la remontada, salieron con ímpetu, decididos a recortar distancias. Sin embargo, el destino parecía estar en su contra. En el minuto 63, el árbitro señaló un penalti a favor de la Arandina, que no desaprovechó la ocasión para anotar su cuarto gol, dejando casi sentenciado el encuentro.

A pesar del marcador adverso, los rojillos no bajaron los brazos. En el minuto 77, un saque de esquina ejecutado por Arribas encontró la cabeza de Sousa, quien remató con fuerza, pero el balón no encontró su camino a la red, sellando la suerte del equipo local.

Con el pitido final, la RSD Alcalá se despidió del Trofeo Cervantes como subcampeones. A pesar del resultado, los chicos de Vivar Dorado demostraron que tienen garra y potencial, y aunque la pretemporada concluyó con este tropiezo, nadie puede negar que han dejado huella en cada rival que han enfrentado. Ahora, el foco se centra en el próximo sábado, cuando arrancará la temporada oficial, donde los rojillos buscarán redimirse y comenzar con buen pie.